Galicia es una de las regiones europeas con mayor riqueza en aguas minerales y, en consecuencia, con mayor tradición en su uso. Hay evidencias de su utilización ya desde tiempos muy antiguos, incluso anteriores a la romanización. El gran auge llegó en los siglos XIX y XX debido a los cambios culturales de esos tiempos y a la falta de medicinas efectivas para muchas dolencias.
En Piñeira, aldea actualmente abandonada de la parroquia de O Burgo, se encuentra el manantial minero-medicinal del mismo nombre, y que alerta de su presencia por el fuerte olor de sus aguas sulfuradas. En el siglo XX llegó a tener cierta fama, y se cuenta que familias acomodadas de la ciudad de Ourense pasaban temporadas en Castro Caldelas para tomar sus aguas.
Tradicionalmente, la Fuente de Piñeira se ha utilizado sobre todo para tratar aspectos del aparato digestivo, aunque también son indicadas para procesos reumáticos y enfermedades de la piel.
Propiedades de la Fuente de Piñeira:
Temperatura punto de surgencia: 12 ºC (aguas frías).
Caudal: 0,01 l/s.
pH: aguas alcalinas.
Facies hidroquímica: BNa, sulfuradas.
Año de declaración de utilidad pública: 1892.
Tipo de declaración: aguas minero-medicinales.
POZO DOS CABALOS:
Cerca de la Fuente de Piñeira se encuentra el Pozo dos Cabalos, situado en un hermoso entorno natural. Aquí, una antigua represa retiene el agua del río, formando una piscina a la que en tiempos acudían a bañarse los vecinos de los alrededores.