En esta pequeña y modesta ermita se celebraba la fiesta de San Amaro (o Sanamaro, equivalente a San Mauro abad) cada 15 de enero. Este santo tiene fama de curar y evitar el reúma, y por ello se le pedía en la misa que precedía a la romería. Después, por la tarde, se probaban los chorizos nuevos elaborados en la matanza anterior, y se bailaba y cantaba hasta el anochecer.
En el regreso a casa, los vecinos entonaban canciones como la siguiente:
Si vas a San Sanamaro,déixalle dito ó gaiteiroque veña tocar á Castroo día vinte de xaneiro.
Con ello se hacía alusión a una de las mayores fiestas de Castro Caldelas, la de San Sebastián o Festa dos Fachós, que comienza la noche del 19 de enero con la quema de grandes haces de paja a modo de antorcha: los espectaculares fachós.